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Comprar y vender antigüedades y piezas de colección: consejos y trucos

 

Determinar el valor de una antigüedad o pieza de colección significa más que ubicar un artículo en una guía de precios o basarse en los resultados de una subasta. De hecho, eso es a menudo solo el inicio del proceso de valoración.

Hay una serie de factores a considerar al decidir cuánto valen realmente tus antigüedades o piezas de colección. Con un poco de esfuerzo, paciencia y aprendiendo acerca de tus antigüedades y piezas de colección favoritas, junto con estas pautas para orientarte en la dirección correcta, podrás acercarte a encontrar el valor real de las mismas.

Existen una serie de reglas básicas que debemos tener muy en cuenta a la hora de intentar valorar una antigüedad:

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1. No pases por alto una marca que pueda agregar valor.

Nos guste o no, los artículos grabados con la marca de un fabricante o diseñador suelen valer más que piezas idénticas sin firmar. Usa una lupa o una lupa de joyero, si es necesario, para asegurarte de no pasar por alto una marca que pueda añadir valor y ayudarte a investigar sobre la misma. Con piezas pintadas y hechas a mano, encontrar la firma de un artista, además de la marca del fabricante, es una bendición. Asegúrate de examinar cada pieza con cuidado para encontrar estos valiosos  signos.

2. Considerar la condición en la que se encuentra.

Uno de los factores más importantes a considerar cuando valoras una antigüedad es el estado de conservación de la misma. Incluso cuando encuentres un artículo en una guía de precios, si tu pieza no está en condiciones similares, ese punto es discutible.

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Toma en cuenta todos los defectos, incluidas las astillas, grietas, desgaste excesivo, rasgaduras, manchas o elementos que pueden faltar. ¿Es una mella menor o una grieta importante?. Cualquier defecto que haga que tu antigüedad no se encuentre en su estado original  o nuevo, va a determinar su valor final.

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3. ¿Es común o rara?

Una antigüedad extremadamente rara, aún con factores de condición no excelentes,  puede valer una suma bastante considerable. Por ejemplo, si posees una pieza de cerámica de Newcomb con una grieta fina, aún puede conseguir un buen precio en el mercado. Sin embargo, si lo que tienes es una pieza agrietada de una cerámica más común, probablemente no tenga mucho más que valor decorativo. Si no estás seguro de cómo funciona el mundo de las rarezas en el área de las antigüedades, consulta con un experto en ese campo antes de descartar un artículo dañado.

4. Viejo no siempre significa valioso

Gran parte del valor de un artículo reside en la demanda. Hay muchos artículos con más de 100 años que no tienen gran demanda entre los coleccionistas por lo que su valor es mínimo.

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Toma como ejemplo las postales de principios de 1900. Muchas de estas postales sobrevivieron a lo largo de los años, haciéndolas demasiado comunes para tener demasiado valor. Por el contrario, si posees una postal americana de Santa Claus de la misma época, y difícil de encontrar, es probable que valga más. A veces, una postal de este tipo puede alcanzar los 70¤ o más para un ávido coleccionista o distribuidor. El caso es, siempre, encontrar al comprador adecuado.

5. ¿Es real o falso?

Si una pieza ha estado en tu familia durante muchas generaciones y conoces su procedencia real, puedes sentirte razonablemente seguro de que estás tratando con una antigüedad auténtica. Pero si compras un artículo en un mercadillo o rastro, tendrás que autenticarlo antes de poder determinar realmente su valor. Busca indicios reveladores de desgaste y época, junto con disonancias en las marcas o firmas. Detalles sutiles, a menudo pueden proporcionar pistas sobre la verdadera edad de un objeto.

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6. ¿Ha sido restaurada o reparada?

La restauración profesional puede agregar valor a una antigüedad rara, pero las reparaciones de aficionados afectan negativamente al valor en la mayoría de los casos. Es importante evaluar una pieza para discernir si se ha reparado al azar o si la «pátina» original, que añade valor, se ha eliminado mediante una limpieza inadecuada. Si el pegamento está presente, si existen soldaduras (las soldaduras se detectan fácilmente), o si las virutas se han molido de manera obvia, una antigüedad o pieza de colección se debe valorar en consecuencia.

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Solo las reparaciones menores pueden no afectar al valor de una pieza. Pregúntale a un experto si no estás seguro.

7. ¿Merece la pena recuperarla?

El hecho de que una antigüedad o pieza de colección se rompa o dañe no necesariamente la hace completamente inútil. Muchos distribuidores compran artículos que pueden reparar o usar sus componentes para reparar otras piezas. Las antigüedades seriamente dañadas a veces son transformadas por aquellos ingeniosos en proyectos de cambio de imagen, o puede que resulten interesantes como suministros para artesanos. Dependiendo de la extensión del daño y la utilidad relativa del artículo, aún podría tener algún valor. Es aconsejable comprobarlo antes de desterrarlo al contenedor de basura.

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8. Considera las influencias actuales del mercado

Si has localizado un artículo en una guía de precios o en los resultados de una subasta, ¿la información refleja el precio real de los mercados actuales?. La respuesta es NO, los precios de antigüedades y objetos de colección pueden fluctuar ampliamente y rápidamente dependiendo de la demanda.

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Los precios pueden descender a los niveles previos a la demanda una vez que ha pasado el boom, o pueden seguir siendo altos debido a la disminución de la oferta, ya que los distribuidores tienen dificultades para reponer los inventarios. Es importante observar los mercados y estar al tanto de las tendencias que afectan al valor.

9. Pide consejo a un amigo experto

Muchas veces, cuando vemos en televisión los realities sobre compra venta de antigüedades, los tasadores muestran cómo han consultado con sus colegas para determinar algunos precios. Esto también sucede en el mundo no televisado. Si has establecido una relación con un amigo bien versado o un distribuidor en el que confías, solicita su opinión.

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Algunas veces, su juicio educado anulará lo que pensabas, pero es bueno obtener el consejo de los demás cuando te sientes un poco inseguro sobre la valoración de un artículo, especialmente aquellos que rara vez se ven en el mercado de segunda mano. Asegúrate de conservar sus favores, pregunta cuando realmente lo necesitas, no seas pesado. A los tasadores de antigüedades se les paga, realizan su trabajo para ganarse la vida, al igual que otros profesionales, así que sé respetuoso con su tiempo.

10. Piensa en valores comunes en base a piezas iguales o similares

Los tasadores a menudo valoran las antigüedades en función del valor medio en vez de sobre los precios más altos o más bajos marcados para artículos similares. Hay momentos en que una pieza se venderá muy alto en una subasta, pero el mismo artículo tendrá un precio más moderado en una tienda de antigüedades.

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En el mismo sentido, los artículos tampoco se valoran en función de una compra en el rastro o en un mercadillo. Sin embargo, las rarezas son más difíciles de valorar. El precio de venta más reciente puede ser un buen indicador del valor esperado de mercado al tasar un artículo raro.

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Si tienes en casa o en algún trastero piezas que crees que pueden tener cierto interés en el mercado de las antigüedades o de piezas de colección, te invitamos a que nos pidas cita para que podamos informarte acerca de su verdadero valor.

Si por el contrario, estás interesado en conseguir alguna pieza especial y a buen precio, te esperamos en nuestra tienda. Descubrirás todo un universo de tesoros del ayer.

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